Hasta que quiera Messi

Sueña fútbol, vive fútbol

El clásico ríoplatense 194 fue empate 2-2, un Luís Suárez que una vez más, volvió a ser decisivo en el arco rival, asistiendo a Edinson Cavani en el primer gol y generando él mismo el tiro libre para el segundo. Lionel Messi no quiso ser menos: asistió al Kun Agüero para el 1-1 y cobró el penal cometido por Martín Cáceres para el 2-2 final.

Las intenciones de cada uno en el arranque eran muy claras: una Argentina que buscaba con el toque por los costados, buscar espacios para filtrar los pases a un Dybala más tirado hacia el costado derecho, Messi más al centro y el Kun Agüero que se lo vio muy aislado por el sector izquierdo, donde no hizo daño.

Uruguay fue más directo: replegado, incluso por momentos con Cavani y Suárez, referentes de área de la Celeste, por detrás de la línea de la pelota para ocupar espacios y no permitir el juego ni de Paredes ni de De Paul en la batalla del medio.

En un partido que fue muy cortado por las infracciones, el conjunto uruguayo lo despertó con el gol: Lozano logró desbordar por derecha a Saravia, que no la tuvo todas con él en la noche de Tel Aviv, dio un pase al medio para Torreira y aprovechó la lentitud de en la salida del lateral derecho argentino para pincharla a un Suárez habilitado para que solo de el pase al medio para el 1-0 de Cavani. Gol cincuenta del delantero del PSG con su selección.

Uruguay en su juego, siguió cediendo la pelota a los argentinos, donde solo Messi con sus arranques o algún pase de Dybala pudieron desequilibrar. Ya sobre el final de la etapa inicial, el crack de Juventus vio el fondo de la red uruguaya pero el árbitro anuló la conversión por una mano previa. Mala suerte para 'la Joya'.

Ya en el segundo tiempo, fue un partido más ida y vuelta. Argentina adelantó aún más sus líneas y tanto Saravia como Taglafico pasaban al ataque, tratando de ahogar a Uruguay que siempre esperó y salió de contra ante cada error del equipo de Scaloni. De Paul y Paredes no fueron el nexo entre el medio y el ataque.